La empatía ¡Me importa!, ponerme en piel ajena cuando se sufre, cuando la libertad es atenazada ¿El egoísmo? A veces; es la única arma que pueden blandir los débiles.
Poco antes de las ocho de la mañana
he disfrutado con la fuerza del oleaje
con la pleamar
esa resaca que anhelaba arrastrarme al océano
con la transmutación de la desembocadura
rio Piles – ría Piles
esas aguas que se adentran en los límites terrenales
ese Gijón quebrado
Gigia latino
donde se refrescaron los celtas
mis pensamientos atrevidos
soy un hombre “entendido”
amador de un semejante
no observo a las mujeres
práctica peligrosa
están en guardia
preparadas para el asalto
blandiendo tetamen
si no andas con ojo avizor
como mínimo
te miran de soslayo
y te tildan de machista
aunque las honres
en lo mas adentro del alma.
Me entran ganas de escribir versos cuando veo estas imágenes
¡Las ganas que me entran!
me contengo
tristes seres humanos femeninos en un tierra de auténtico agobio
lugar donde el mal subyace
donde el dolor es intenso
donde las condición femenina es enclaustrada
donde los hombres perecen
mueren
arrancan sus cabezas con cimitarras
revientan a sus cuerpos con dinamita
¡Que triste!
¡Que tristeza!
seres humanos abocados al temor a la muerte maldita
hombres y mujeres
¡Todos!
¡Todas!
desde los lares de la opulencia
de la pretendida democracia
libertad
denuncian la opresión
con vestimentas que deberían ser arrojadas a la basura.
Soy extremadamente feliz con tan poca cosa
levantarme a las siete de la mañana
bostezar ruidosamente
vestirme casi con harapos
sin dinero encima
encaminarme a la playa
descalzarme
comenzar a caminar entre la arena y el oleaje
reflexionar sobre mi alma
sobre este cuerpo envejecido
imponerme una terapia acientífica
expulsando las correctas matemáticas
abrazar la sensación de transmitir poesía
huir del miedo
respirar aire iodado
delinquir sin cordura
musitar una oración
recordar que la nada ahí está
que me envuelve la fuerza marina y del sol
que Dios mece mi espíritu
que me espera al final de mi odisea.
Está a punto de culminar el día
he sido incapaz de escribir un verso
mis letras se precipitan hacia el abismo
¿Dónde están las frases que debo de escribir?
los sentimientos del alma ardiente
arden con llamaradas fornicando con humaradas
y mi espíritu tiembla
en la tormenta celestial de un planeta agonizante
¡No quiero escribir esto…Dios mío!
noche oscura donde tu luna no emerge
¡Dios mío…haz que se desangre la luna pálida!
buenas noches amigos, amigas
Dios descansa
no me permite acurrucarme en su regazo.
Desapareció la cordura de mi alma
me sumí en imágenes vesánicas de mi alterada mente
mañanada entre oleaje, arena y boira
humedad
epidermis fría
una cría de lenguado camuflándose en la arena
impresiones ópticas e hipnóticas
reflejos verdes centellantes
en la espuma salvaje del océano
deseo lanzar una oración al espacio
a ese Dios sol que no termina de mostrar su luz
su sabiduría
la boira impertinente
las nubes jugueteadoras
soy capaz de transmutarme
soñar
delirar
que soy un arcángel fornicador
que mi cuerpo se une al cuerpo de un hombre
que me río
disfruto
espantando a una vieja gaviota
mientras grazna como un cuervo hembra.
Desde el pedrero de San Pedro
hasta el pedrero del Piles
a “tiro piedra” de las “Chapones”
a las ocho de la mañana
arena agua playa
meditación caminada mística
zozobrando mi espíritu
hablando con mi alma
paseada iluminada hasta los Pericones
a contemplar al niño carbayu
sus pueriles ramajes
los quince poemas haciéndole la corte
Anah Dime me sonríe desde su mundo espírita
y habla a mi entrecejo
.-No le escribas poemas al carbayín
dedícamelos a mi y te comes un carbayón
brindando por mi espírita realidad.
Antes de las ocho de la mañana
ahí estaba
disfrutando de Ra…el Dios Sol
se mostraba tímido
sin Ñubero molestándole en la nuca
horizonte raso
sin nubes
y yo; en un frenesí iniciático
mis pies golpeando las aguas
de un salvaje Cantábrico
transmutado en una laguna
de belleza infinita
turquesas acariciando mis güeyos
libertad pletórica
gozo.
Estos versos he rescatado
del largo poema dominical
lo terminé con un paseo
una larga caminata hasta Viesques
sincera solidaridad
falsa moraleja de un cuento.
Dos días mas tarde
nuevas sensaciones en la playa
Dios deja de ser Dios
la mar alardea de fuerza
la luna llora entre tormentas
estoy a punto de despedir a un Martes
he estado inquieto
extraño
Dios me ha llorado
no ha permitido
que meditase en silencio.
A las ocho y cuarto de la mañana
el Dios sol se mostraba impúdico
playa de San Lorenzo con la pleamar bajando
yo
deseando meditar
imposible mirar el reflejo luminoso
en las aguas salvajes
irritaba y cegaba a mis ojos el sol
caminaba en silencio
el agua enfriaba a mis tobillos
era un anhelo meditar sobre el odio
la naturaleza etérea me decía no
no es el camino
el odio debe de caer en saco roto
que no se acumule
que no guarde sus palpitaciones intestinas
los homosexuales siempre han sido agredidos
les han marcado triángulos rosa
les han tatuado esvásticas
les han dibujado hoz y martillo
los han internado en campos de concentración
los han violado en gulags
un grupo de energúmenos
hace tres días
a uno de mi misma condición
¡No lo escondo y nunca estuve en armario maldito!
le han violentado
marcándole a puñal en el glúteo
el término de: Maricón.
Una sentencia peyorativa
un afear el estilo de un pensador
un escritor
un poeta
hoy; me han tildado de hiriente
¡Que vocablo mas expresivo!
¡Que halago he recibido!
sin el deseo del que me ha juzgado
hirientes fueron
Miguel Hernández
Federico García Lorca
Antonio Machado
Antonio Buero Vallejo
tanto llegaron a serlo
uno murió en la cárcel
otro fusilado
hasta abandonaron a uno en un prostíbulo de Coillure
¡Uno triunfó!
a costa de acompañar y dibujar a Miguel
en la cárcel
de ser condenado a muerte y conmutado
así debemos ser los que lanzamos plumas y letras
hirientes hasta la médula
hirientes hasta enemistar a los dioses
hiere el escultor
la madera
la piedra
el mármol
el esmaltador hiere el metal
con fuego
con llamaradas sutiles
para dominar el sílice
incluso hiere el reciclador
las latas de conserva las transmuta en armazones
donde sublimará el arte
¡Soy hiriente…¿Y qué…?!
y seré capaz de pensar
unos veces como un carcamal de derechas
otras como una antigualla de izquierdas
hasta como lo que soy
un anarquista
un libre pensador
hiriendo con mi sable erótico
a lo mas profundo de mi DIOS.
Siete y cuarenta y cinco minutos de la mañanada
en Gijón
cielo raso
me recuerda al estepario castellano
ambiente fresco
creativo
por eso estoy escribiendo este poema
de playa no playa
de pleamar tranquila
ese run run que abanica los oídos
apenas franja de arena
a lo largo del paseo litoral
solitario
muy solitario
inquietante y propicio instante para meditar
tres jóvenes se sonrían con alegría en una de las escaleras
.-Jóvenes todavía hay felicidad en el mundo ¡Disfrutad!
Y medito
y recuerdo a un parleru carbayín
no quiero que me hable
todavía es pueril
prefiero el aliento amistoso
de un ser
que ya nunca olvidaré
es un espíritu cargado de bondad artística
Anah Dime.
El pespunte del vals de las nubes
no impedía al majestuoso Dios sol
mostrarse impúdico ante los seres vivos
que jugueteábamos entre la arena y el oleaje
en la playa mítica gijonesa de San Lorenzo
primeros momentos de la mañanada
el mar mostrando oleaje y coraje
esa resaca saludable para martirizar a los pies
para que se anclasen en la arena
y no ser arrastrados hacia el fondo del paraíso
Dios corroía mis sentimientos
su continuo palpitar en mi mente humana
el pensamiento de la muerte
tan cercano en esta época
ha muerto el marido de una poetisa
mañana: ¿Seré yo, el que se abrace al seno de Abraham?
¿Qué ser cercano a mi espirará sin besar la luz lunar?
preguntas
preguntas
preguntas
preguntas sin respuestas
día dominical
para sumirse en ese Dios misterioso
que nos dice:
.-Adelante disfrutar de mi creación
vivir
revolotear el instante
como lo hacen las gaviotas
sin analizar mi misterio
y sin tener conciencia de finitud.
He terminado el día
haciéndome la manicura
de mis manos y pies envejecidos
todavía puedo hacérmela yo mismo
deseo escribir versos
que formen un poema nocturno
antes de dormir
antes que las pesadillas pululen por mi onirismo
que mis poemas se conozcan
que sean leídos
en una red social
o en un blog antiguo
posiblemente no vuelva a recitar
a decir esas frases que emanan de mi alma
fracaso tras fracaso
soy hiriente
quizás por eso entre en el olvido
vejez que huele a alzhéimer
seguiré escribiendo
seguiré escribiendo
aunque lo que me apasiona
es ser un aedo en el desierto.
Fotografías de: Joseba Ayensa.
Aforismo y poemas de: -Joseba Ayensa (poeta-cantor.)-
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