El gran hacedor enloqueció
Dios con una sublime sonrisa
entonó canciones a los pájaros
susurró a las aves del paraíso
les ofreció ramilletes de pensamientos
jazmines
claveles
orquídeas
las mariposas ocasionaron revuelos astrales
y sonó un vals apasionado
mientras el Danubio bailaba en su fluir al mar del misterio
el poeta enloquecía más que el propio Dios
observaba al despejado horizonte
daba un alarido
que los seres humanos se encuentren
con amor alegría y paz.
En la noche he danzado
con el delirio quebrado onírico
el éxtasis ha culminado
en una relajación de sedosa alegría
como poeta
sigo eyaculando versos
amando intensamente el oscilar de la boira
la boira refresca
su gris palpitar
rompe en mil pedazos la tediosa realidad
y penetras en la sublime irrealidad
que te hace cabalgar
a conquistar el imperio de los sentidos del alma
desde ella se emite el salmo del alarido
paz amor encuentro.
Nuevamente enclaustrado
en un entorno vibratorio
donde los seres humanos
en cuerpo físico mortal
acuden a recibir consuelo
a percibir el sutil misticismo
esa elevación incontrolable
donde el espíritu transita danzando
donde la luz solitaria
temblante
ilumina un sagrario católico
cierro los ojos
para levitar mentalmente
desde un lugar incógnito
observo a mi cuerpo
distraído
orando por la paz amor encuentro.
Vídeos auto grabados con la cámara del ordenador por: -Joseba Ayensa-.
Poemas y textos poéticos:
-Joseba Ayensa (poeta-cantor.)-